A Dios nadie lo ha visto jamás: lo ha contado el Hijo Unigénito, que está en el seno del Padre. (Juan 1:18)
“... nadie puede verme y seguir con vida.” dijo Dios en Éxodo 33:20.
En este prólogo se refuta contundentemente la herejía de algunos que hablan del Señor Jesús como criatura.
Está concluyendo el prólogo del evangelio según Juan, diciendo el evangelista que en su escrito será revelado Dios Padre a través de la Palabra.
¿Puede calcular el nivel de importancia de lo que a continuación va narrar el apóstol Juan?
¿Ya siente algún interés usted de leer este libro?
El Unigénito de Dios Padre (único en Su naturaleza) caminó entre nosotros para darnos a conocer lo perfecto, amoroso, misericordioso y poderoso que es Dios. El que vio al Mesías vio al Padre eterno.
Paz a usted y su casa.
* Imágenes por 현섭 김, de Pixabay, y clideo
* Fragmentos bíblicos tomados de: “Biblia de Jerusalén, 2019, Desclée De Brouwer, Bilbao, España”