V. Duración del Antiguo Testamento
A. Hasta que llegase la descendencia
B. Hasta que iniciara el Nuevo Testamento
C. Hasta que hubiera nuevo sacerdocio
D. Hasta que Jesucristo cumpliera todo
VI. Propósitos del Antiguo Testamento
A. Para señalar y condenar el pecado
B. Para guiar al ser humano hacia Cristo
* No fue para justificar
VII. El Pacto Antiguo incluye leyes ceremoniales y morales
Conclusión
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V. Duración del Antiguo Testamento
La Biblia enseña hasta cuándo el Antiguo Pacto (o testamento) estaría vigente, aun siendo escrito por voluntad divina.
A. HASTA QUE LLEGASE LA DESCENDENCIA
Siendo una añadidura al plan original de salvación, para manifestar el pecado, no podía durar para siempre, su duración sería hasta que viniera la descendencia o simiente:
Gálatas 3:19
“Entonces, ¿para qué sirve la ley? Fue añadida para poner de manifiesto las transgresiones, hasta que llegase la descendencia depositaria de la promesa, promulgada por los ángeles y con la intervención de un mediador.”
(Ga 3:16 “Pues bien, las promesas fueron hechas a Abrahán y a su descendencia. La Escritura no dice ‘y a los descendientes’, como si fueran muchos, sino a uno solo, a tu descendencia, es decir, a Cristo.”)
B. HASTA QUE INICIARA EL NUEVO TESTAMENTO
Igual que en las leyes terrenales, no pueden estar vigentes dos testamentos, el último es el válido, el viejo queda anulado como ley. El último testamento (el nuevo) entra en vigencia hasta que el testador muere.
Hebreos 9:15-17
“Cristo es mediador de una nueva alianza, pues, al intervenir una muerte que libera de las transgresiones de la primera alianza, los llamados reciben la herencia eterna prometida. Pues, donde hay un testamento, se requiere que conste la muerte del testador, ya que el testamento es válido en caso de defunción, y carece de valor en vida del testador.”
Esto significa que el Antiguo Pacto fue válido desde aquel día en que Moisés recibió las tablas de piedra en Sinaí, hasta la muerte del Señor Jesús.
C. HASTA QUE HUBIERA NUEVO SACERDOCIO
La ley divina (testamento) está directamente vinculada al sacerdocio; el antiguo sacerdocio era de la tribu de leví, el nuevo pertenece a la tribu de Judá. Enseña la Biblia que teniendo nuevo sacerdocio (el Mesías) hay también nueva ley (pacto, testamento, alianza).
Hebreos 7:12-14
“Porque, cambiado el sacerdocio, necesariamente se cambian las leyes. Pues aquel de quien se dicen estas cosas pertenece a una tribu de la que nadie sirvió al altar. En efecto, es bien sabido que nuestro Señor procede de Judá, una tribu que no menciona Moisés al hablar del sacerdocio.”
D. HASTA QUE JESUCRISTO CUMPLIERA TODO
Mateo 5:17-18
“No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolirlos, sino a darles cumplimiento. Os aseguro que, mientras duren el cielo y la tierra, no dejará de estar vigente ni una i ni una tilde de la ley hasta que todo suceda.”
¿Alguien cree que Jesucristo no cumplió con lo establecido en la ley del Antiguo Pacto?
VI. Propósitos del Antiguo Testamento
Encontrando los propósitos por los cuales existió el A.T. podremos comprender con mayor facilidad que hoy no tiene validez el Pacto Antiguo.
A. PARA SEÑALAR Y CONDENAR EL PECADO
El ser humano debería entender que ni por esfuerzo propio ni con ayuda de la ley podría alcanzar vida eterna.
Gálatas 3:19,22
“Entonces, ¿para qué sirve la ley? Fue añadida para poner de manifiesto las transgresiones, hasta que llegase la descendencia depositaria de la promesa, promulgada por los ángeles y con la intervención de un mediador... Pero la Escritura encerró todo bajo el pecado, a fin de que la promesa fuera otorgada a los creyentes mediante la fe en Jesucristo.”
Romanos 5:20
“La ley, en definitiva, intervino para que abundara el delito; pero donde abundó el pecado sobreabundó la gracia.”
B. PARA GUIAR AL SER HUMANO HACIA CRISTO
Gálatas 3:24
“De manera que la ley fue nuestro pedagogo hasta la llegada de Cristo; a partir de aquí somos justificados por la fe.”
* NO FUE PARA JUSTIFICAR
Romanos 3:20
“ya que nadie será justificado ante él porque haya cumplido la ley, pues la ley sólo proporciona el conocimiento del pecado.”
VII. El Pacto Antiguo incluye leyes ceremoniales y morales
No han perdido vigencia solamente una parte de las leyes del Antiguo Testamento sino que todas han caducado. La ley del Señor, o Ley de Moisés, o La Ley, es una sola en el Antiguo Pacto.
Lucas 2:22-24,27,39
“Cuando se cumplieron los días en que debían purificarse, según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor, como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor, y para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor... Movido por el Espíritu, vino al Templo. Cuando los padres introdujeron al niño Jesús, para cumplir lo que la Ley prescribía sobre él... Así que cumplieron todo lo ordenado por la Ley del Señor, volvieron a Galilea, a su pueblo de Nazaret.”
Si alguien quiere practicar una parte de la ley, debe cumplir todo lo demás.
Gálatas 5:3
“Os declaro de nuevo que todo hombre que se circuncida queda obligado a practicar toda la ley.”
Santiago 2:10-11
“Porque quien observa toda la Ley, pero falta en un solo precepto, se hace reo de todos. Pues el que dijo: No adulteres, dijo también: No mates. Si no adulteras, pero matas, eres transgresor de la Ley.”
Conclusión
Cumplir parte del Antiguo Testamento mientras estamos regidos por el Nuevo es adulterio espiritual:
Romanos 7:1-4
"¿Acaso ignoráis, hermanos, que la ley sólo obliga al hombre mientras éste vive? —Hablo a quienes entienden de leyes—. Así, la mujer casada está sujeta por la ley a su marido mientras éste vive; mas, una vez muerto el marido, se ve libre de la ley del marido. Por eso, mientras vive el marido, será considerada adúltera si se une a otro hombre; pero, cuando muere el marido, queda libre de la ley, de forma que no es adúltera si se une a otro. Así pues, hermanos míos, también vosotros quedasteis muertos respecto de la ley al incorporaros al cuerpo de Cristo, pues pasasteis a pertenecer a otro: a aquel que resucitó de entre los muertos para que diéramos frutos que nos conducen a Dios."
Teól. Fernando Montes